18 de septiembre de 2008

19 de septiembre de 2008

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Traducción de Mila
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Enfants Kidnappés

*Un sospechoso (continuación) *

19 de Septiembre de 2008

* Audicion de Derek F. (Testigo que vio actitudes sospechosas) *

El declarante viene a nosotros como testigo por el hecho de haber visto una presencia sospechosa a finales de la mañana o principios de la tarde del 02 y 03 de mayo último, que, por su conducta, podría estar relacionada con los hechos actualmente investigados. El declarante no conoce el idioma portugués ni en su forma hablada ni en la escrita, será asistido en su declaración por un intérprete llamado Gaynor Louise CJ

El declarante posee una casa de vacaciones sita en la rua do R. .. Lote 1 – Apart. 7 - Praia da Luz, donde pasa largos períodos de vacaciones con su esposa, Christine Margaret D. (con la que está casado desde hace 36 años). Ambos llegaron a Portugal el 28 de abril pronto por la mañana. Se instalaron en el apartamento indicado anteriormente. Volviendo a los hechos , el declarante no recuerda exactamente si era a finales de la mañana o primeras horas de la tarde, pero el 02 y el 03 de mayo último, el declarante se paseaba por las calles cerca de su residencia de vacaciones en Praia da Luz con su pareja, Christine. Mientras pasaban, cerca del bloque residencial del Ocean Club, el declarante se fijo en la presencia de un vehículo que describió como de tipo comercial de marca OPEL CORSA (sin certeza), de color blanco. Él piensa que era modelo antiguo.

Además, el declarante se cruzo con un individuo que se encontraba bajando por la izquierda de la calle, en la entrada del pequeño aparcamiento existente, frente a la recepción del OCEAN CLUB El individuo parecía observar atentamente todos los movimientos de la calle. El declarante nos cuenta esto porque según dice él, posee un gran instinto de vigilancia, resultado del hecho de que él es miembro de una comunidad de vecinos donde vive en Inglaterra, creada con fines de seguridad, y que él, es el encargado de la vigilancia y la detección de personas sospechosas. Esta es la razón por la que se fijo en el individuo a la diferencia de su pareja que no vio nada. Según la descripción del declarante se trataría de una persona de raza caucásica, de piel oscura, mediana corpulencia, de unos 1,70 metros, con edad entre 25 y 30 años. El individuo tenía el pelo oscuro y denso. Aunque no lo observo con detalle, el declarante piensa que el individuo llevaba una camiseta de color claro, probablemente amarilla. Según el declarante, no se trataría de un turista que frecuenta el lugar de manera habitual. El declarante asocio el individuo y el vehículo porque miraba regularmente al lugar donde el vehículo se encontraba estacionado. Después de haberse enterado de la desaparición de la menor británica Madeleine McCann en la noche del 03 de mayo, mientras se encontraba dentro de los apartamentos de la empresa mencionada anteriormente, el declarante asocio esta desaparición con la presencia del individuo y del vehículo que estaba aparcado a poca distancia de las residencias del Ocean Club, en el lateral, donde es posible acceder a los apartamentos. Por lo tanto, el declarante llego a la conclusión de que el individuo controlaba los movimientos de los alrededores y, eventualmente, el interior del apartamento. El declarante añade no haber visto a nadie más en las cercanías del lugar de la desaparición. De hecho nunca vio a la desaparecida Madeleine McCann. Por ello, no podría reconocerla si estuviera en su presencia. Tras su declaración, un retrato robot N º 18/2007 ha sido establecido sobre la base de las características individuales proporcionados por el declarante y ha sido adjuntado al expediente. Como respuesta a nuestra pregunta, el declarante precisa que regresa al Reino Unido el 12 de mayo próximo.

Después de la lectura en presencia de la intérprete que le explica , se reafirma y firma.

* Segundo testigo: *

El declarante es escuchado como testigo. Se trata del llamado Nuno Manuel LJ es de nacionalidad portuguesa, pero emigró a Alemania hace 14 años. Se casó con una ciudadana alemana en Dinamarca, aunque el matrimonio no está reconocido en Portugal. Tiene dos hijos llamados Lucio LJ de casi tres años y Liann Maria LJ de casi cuatro años. Está de vacaciones en Portugal desde el 22 de abril hasta el 13 de mayo. Reside en la casa de su madre, rua de M... en Sagres, acompañado de sus dos hijos y su esposa Birgit EE que no habla portugués.

El 29 del mes pasado, después de habérsele entregado un coche de alquiler, el declarante fue a pie, a la playa de Mareta en Sagres hacia las 15h00, acompañado por su esposa y sus hijos. Desvistieron a los dos niños para dejarlos en slip y luego los dejaron jugar en la arena a unos 40 o 50 metros de ellos. Entre las 16:00 y 17:00, el declarante noto la presencia de un individuo, armado con una cámara fotográfica plateada, que de manera oculta y disimulada, fotografiaba a sus dos hijos. En efecto, el individuo, en lugar de tomar fotos con su cámara en la mano y llevándola hacia su rostro, la había dejado sobre su vientre, desde donde tomaba las fotos. El declarante es formal, a causa del ruido que hacia el obturador por el chasquido en cada toma. "

Después de tomar tres o cuatro fotos de sus hijos, el declarante se dio cuenta de que el individuo había tomado varias fotos de otros dos niños de sexo masculino, con edades entre cinco y nueve años. Se trata de los hijos de una pareja que vive cerca de casa de la madre del declarante pero de los que no sabe el nombre. Ante esto, y suponiendo que el objetivo del "fotógrafo" sería secuestrar a sus hijos o el uso de las fotos de manera ilícita, el declarante comenzó a mirar al individuo de manera insistente y agresiva. Lo que llevo al individuo a abandonar la playa.

Hacia la 18h00/18h30 cuando el tiempo refresco, él y su familia abandonaron la playa para ir a una pastelería a unos 400 metros de la playa. Es la pastelería "Marreiros", donde se sentaron en una mesa. En el momento en que el declarante bebía su café, el "fotógrafo" entro en la pastelería. Al mismo tiempo, la hija del declarante, jugaba entre las mesas. El fotógrafo se acercó rápidamente del lugar en que la niña estaba jugando. En este momento, la hija del declarante dejo de correr para quedarse cerca de su familia. El fotógrafo salió y volvió a entrar en la pastelería , y salió de nuevo sin comprar nada.. Sorprendido por esta situación, el declarante no tuvo ninguna duda de que la intención del individuo era secuestrar a su hija. Se levantó y, utilizando su teléfono móvil, tomó varias fotos del individuo de manera bien visible a fin de que este último se diera cuenta de que lo estaba fotografiando. Las fotos no dieron resultado porque el declarante había dejado su dedo delante de la lente de su cámara. Él siguió con la mirada al "fotógrafo" que se fue en un vehículo de marca "Renault Clio", de color gris. El declarante tomó nota del número de la matrícula del vehículo. El fotógrafo estaba acompañado por una mujer que estaba sentada en el vehículo.. El declarante fue capaz de tomar una foto del coche que él nos muestra ahora. Podemos leer la fecha y la hora: 18h08 del 29/04/2007.

Más tarde, habiendo ya calmado su tensión , el declarante arrugo el papel en el que había escrito el número de la matrícula y lo tiró. Pero ayer, el día 04 de mayo, el declarante fue a una agencia de alquiler de coches, denominada "Turinfo" para alquilar un vehículo hasta el final de sus vacaciones. El recepcionista le dijo que volviera a las 13.30. El declarante a continuación, entró en un bar la "Rosa dos Ventos" - no muy lejos de la agencia de alquiler "Turinfo", donde bebió un café para pasar el tiempo. Después de un rato, mirando afuera, vio al "fotógrafo" dar la vuelta a la plaza a pie y solo. De vuelta en su casa, habló con su esposa que le dijo que viniera a contarlo, sabiendo que una niña muy parecida a Lianne había desaparecido el día anterior.

Por lo tanto, después de haber consultado un periódico, contacto con la policía. En cuanto a la matrícula del vehículo sospechoso, no recuerda más que las letras del centro AV y el 67 al final. En cuanto al sospechoso es descrito como sigue:

Tipo caucásico, piel oscura, cabello oscuro, mediana corpulencia, alrededor de 30 años, 1,70 metros sin ningún tipo otro signo particular. Llevaba gafas oscuras y compactas. Vestía una camiseta clara o amarilla A petición nuestra, dijo que podría hacer un retrato robot del sospechoso y reconocerlo en las fotos.

Fotografías

El 5 de mayo de 2007 compareció en el DIC Portimão Nuno Manuel L.J. ante mi, J.C. Inspector con el fin de proceder a un reconocimiento fotográfico de sospechosos. Sobre la base de la descripción del interesado y del “modus operandi”, mostramos varias series de fotografías de sospechosos cuyas características físicas y criminológicas corresponden a los datos proporcionados. Por esta visualización, el interesado no reconoció el sospechoso descrito.

Para ilustrar este artículo, adjuntamos una parte del reportaje fotográfico hecho en los lugares donde fue visto el sospechoso “fotógrafo”.


Interviú

El sumario del caso Madeleine

• El trabajo de más de cien agentes de la Policía Judiciaria portuguesa investigando durante un año no ha servido para aclarar lo ocurrido el 3 de mayo de 2007 en el apartamento 5A del Ocean’s Club de Praia da Luz, donde la niña Madeleine McCann dormía con sus hermanos gemelos.

Reportaje por: Manuel MARLASCA / Luis RENDUELES
Fotografías por:
01/09/08

Pese a todos los esfuerzos y a haber explorado todas las líneas de investigación, no ha sido posible determinar las circunstancias concretas de la desaparición de la menor y, consecuentemente, conocer su actual paradero”, decía el pasado 30 de junio el inspector de la Policía Judiciaria portuguesa Joao Carlos, poniendo la losa que cerraba más de un año de investigaciones. Con estas lapidarias y desesperanzadas palabras se cierran también 17 volúmenes, 12.000 folios y miles de horas de trabajo encaminadas a un objetivo que, hasta ahora, se ha demostrado como imposible: saber qué pasó el 3 de mayo de 2007 en el apartamento 5A del Ocean’s Club de Praia da Luz, un complejo turístico del Algarve portugués en el que la familia McCann pasaba sus vacaciones.

El sumario del caso, al que ha tenido acceso interviú, detalla todas las investigaciones hechas por la Policía Judiciaria, encargada de las pesquisas, y realiza una severa autocrítica hacia los propios investigadores, si bien es cierto que Gonçalo Amaral, el primer responsable de las pesquisas, fue apartado meses antes de que se concluyese el sumario.

Las críticas se encaminan, sobre todo, hacia los primeros momentos del suceso, tras la alarma dada por Kate McCann a las 22 horas del 3 de mayo de 2007. Según consta en el sumario, la contaminación del apartamento llegó hasta el punto de que las únicas huellas con valor probatorio recogidas allí pertenecen a la madre de Madeleine y a una agente de la Guardia Nacional Republicana –el primer cuerpo policial que acudió al lugar del suceso–. Además, se señala en el informe final del caso que en esos primeros momentos se cometieron dos graves errores: no buscar fármacos que podrían haber sido empleados para mantener a la desaparecida dormida ni rastrear el apartamento en busca de vestigios de sangre, algo que se hizo muchas semanas después.

El sumario desvela el gigantesco trabajo al que estuvieron dedicados más de cien agentes portugueses: se han analizado 74.000 llamadas telefónicas hechas en la zona de Praia da Luz entre el 2 y el 4 de mayo; se ha tomado declaración a 198 personas y se ha hablado con otras 500 de manera informal; se han registrado, con permiso de los propietarios, más de 400 casas y habitaciones en busca de algún rastro de la pequeña desaparecida; se comprobaron todas las salidas en tren, avión o barco de la zona en los días posteriores al suceso...

Finalmente, la policía barajó dos únicas líneas de investigación: que la niña fue raptada por un desconocido o que la niña murió en el interior del apartamento y se ocultó su cadáver. Para mantener esta segunda hipótesis, que apuntaba directamente a Kate y Gerry McCann, los agentes portugueses contaban con muy pocos mimbres con los que armar el cesto de la acusación: el trabajo de los perros policía (ver recuadro de la página 16) y el testimonio de una empleada del hotel –Silvia Correira–, que dijo que le extrañó mucho que, a las 4 de la madrugada del día de la desaparición, el matrimonio McCann pidiese un cura, sin que hubiera un indicio de que Madeleine estaba muerta. Y no hay una sola prueba más contra el matrimonio, salvo el testimonio de un irlandés, que dijo haber reconocido a Gerry la noche de la desaparición de la pequeña, con una niña en brazos en dirección a la playa. Sin embargo, a esa misma hora, otros muchos testigos sitúan a Gerry en el Tapas Bar, cenando con sus siete amigos.

La policía portuguesa se lamenta en uno de los informes de que no ha podido llevar a cabo una reconstrucción de los hechos con todos los participantes en la cena del Tapas Bar. La reconstrucción serviría para aclarar algunas contradicciones en los testimonios de los McCann y sus amigos. Por ejemplo, la policía portuguesa no se explica cómo es posible que sólo Jane Tanner viese a un individuo sospechoso con una niña en brazos si Gerry McCann y Jeremy Wilkins estaban junto a ella y mirando en la misma dirección. Los investigadores no dan crédito a la versión de todos los amigos de los McCann, que señalaron que durante las cenas se levantaban cada media hora para comprobar cómo estaban sus hijos. La vecina del piso de arriba de los McCann contó a los agentes que la noche anterior a su desaparición, Madeleine lloró durante 90 minutos sin que nadie la consolase.

Con nuestro agradecimiento a "Luisa"



Interviú

El sumario del caso Madeleine: “Todos mienten”

• La Policía Judiciaria intentó evitar la salida de Portugal de los padres de Madeleine McCann, a los que consideraba responsables de la desaparición de la niña. Así se lo pidieron a las autoridades judiciales en un informe en el que acusan al matrimonio McCann de mentir e intentar confundir.

Reportaje por: Manuel MARLASCA / Luis RENDUELES
Fotografías por:
08/09/08

Los hechos apuntan en el sentido de que la muerte de Madeleine McCann ocurrió el 3 de mayo de 2007 en el interior del apartamento 5A del Ocean’s Club, ocupado por el matrimonio McCann y sus tres hijos. Todo indica que el matrimonio, como autodefensa, no quería hacer entrega del cadáver de forma inmediata y voluntaria, existiendo una posibilidad de que el cuerpo fuese trasladado a un escondite”.

El 10 de septiembre de 2007, un inspector jefe de la Policía Judiciaria portuguesa era así de tajante en un informe remitido al fiscal del caso. Habían pasado más de cuatro meses desde la desaparición de Madeleine y los padres de la pequeña acababan de ser interrogados como arguidos (sospechosos) tras el trabajo de los perros especialistas, que detectaron olor a cadáver y vestigios de sangre en diversas estancias del apartamento donde ocurrieron los hechos, en prendas de Kate y Madeleine y en el coche alquilado por los McCann tres semanas después de la desaparición.

El informe está en el tomo X del sumario de la desaparición de Madeleine –al que ha tenido acceso interviú– y en él, los encargados de la investigación apuntan directamente al matrimonio McCann como responsable de la desaparición de su hija. Por ello, al final del informe se solicita a las autoridades judiciales que se tome una nueva declaración a los padres de Madeleine y que se adopten las medidas necesarias para que no abandonen el país. Lo cierto es que la familia McCann había salido de Portugal el día anterior, 9 de septiembre, apenas unas horas después de ser convertidos en arguidos (sospechosos).

El citado informe, que ocupa una treintena de folios, está firmado por el inspector jefe Tavares de Almeida. En él se resumen todas las, a juicio de la policía, mentiras y contradicciones ideadas por los padres de la pequeña Maddie y su grupo de amigos, los Tapas’ nine, como eran conocidos por la prensa inglesa, haciendo referencia al nombre del restaurante del complejo hotelero en el que cenaron la noche de la desaparición de Madeleine.

“La investigación por la desaparición –dice el informe– derivó en varios escenarios posibles. Los padres atribuyeron inmediatamente la desaparición a un acto de terceros, a un rapto. Todas las acciones de la familia se dirigieron a través de actuaciones publicitarias de un modo antes nunca visto para conducir las investigaciones en la dirección del rapto”. Así, la Policía Judiciaria asegura que los McCann quisieron engañar, no sólo a los investigadores, sino al mundo entero, con la gigantesca campaña que emprendieron para buscar a Madeleine. En ese mes de septiembre, los policías portugueses tienen prácticamente descartada esa hipótesis: “El tiempo pasado no ha permitido confirmar el escenario del rapto, el único válido para los padres. Nunca fue pedido rescate alguno y sólo el testimonio de Jane Tanner avala esa hipótesis”.

Jane Tanner es la amiga de los McCann que dijo haber visto a un individuo sospechoso con un crío en brazos minutos antes de que Kate diese la alarma por la desaparición de su hija. La policía acusa a la propia Tanner y al resto de los amigos de mentir desde el primer minuto de las pesquisas: “La información recibida en los primeros momentos, procedentes de los familiares y amigos, fue ‘trabajada’ por el grupo para dar fuerza a la versión presentada y defendida. Los elementos del grupo celebraron una reunión en la que acordaron determinadas reglas que sustentaban una vigilancia continua de los niños mientras cenaban”, asegura la policía.

Para sustentar esta acusación, los agentes aportaron los manuscritos hallados en el lugar de los hechos en los que hay dos secuencias horarias distintas (ver páginas anteriores) escritas en el interior de la portada y de la contraportada de un álbum de pegatinas de Madeleine. En ellas se detallan las visitas de los comensales de la cena del 3 de mayo a los apartamentos para comprobar el estado de los niños. Para los investigadores, “la versión de que alguien del grupo, de 15 en 15 o de 30 en 30 minutos, se desplazaba hasta los apartamentos para verificar que todo estaba bien cae por tierra. Las declaraciones de todo el grupo están llenas de incoherencias, de lo cual se deduce que todos mienten”.

Para la policía portuguesa, la familia McCann mintió a la hora de contar su posición en la mesa la noche de la desaparición: “Afirman que su posición en el restaurante permitía a los McCann ver el apartamento donde dejaron a los niños, pero el examen del local demuestra que esto es falso”.

La Policía Judiciaria también tiene dudas acerca del momento en el que Kate dio la alarma y pone en tela de juicio su comportamiento: “Es extraño que Kate volviese al restaurante, dejando a sus gemelos, Amelie y Sean, en la misma situación de peligro que Madeleine. No se comprende por qué no utilizó el móvil para llamar a su marido”.

El informe del 10 de septiembre resume los hallazgos de los perros especialistas (ver interviú 1.688 de 1-9-08) y apunta la posibilidad de que los padres de la pequeña alterasen la escena de la muerte: “Hay fuertes indicios de que alteraron la escena del crimen y las alteraciones son indicadores de simulación”. Incluso afirman que podrían haber trasladado el cuerpo desde la habitación de la niña hasta la suya (lo que explicaría el olor a cadáver encontrado en el cuarto del matrimonio) y que el gato de peluche que los agentes encontraron sobre la cama de Maddie también había sido colocado allí de forma intencionada, ya que los perros detectaron olor a cadáver en el peluche, pero no en la cama de la niña.

El 3 de septiembre, un inspector de la Policía Judiciaria redactó un informe en el que ponía de manifiesto sus sospechas sobre los McCann. En él relataba la reacción de Kate cuando le entregó la citación para que declarase ante la policía: “Qué va a decir la prensa cuando lo sepa”, fueron las palabras de la mujer. Además, el policía plasma lo que le dijo Gerry antes de acudir a declarar como arguido: “No tenéis ninguna prueba para acusarnos de la muerte de Madeleine: perdéis el tiempo”.

Con nuestro agradecimiento a "Luisa"


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Traducción de Mercedes
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Mirror.co.uk

Kate McCann furiosa con la publicación del diario en un tabloide dominical

By Rod Chaytor 19/09/2008

Se dice que anoche Kate McCann estaba desolada con la publicación no autorizada de su diario en un desprestigiado periódico dominical.

Su diario fue confiscado y fotocopiado por la policía portuguesa tres meses después de que su hija Madeleine, entonces de tres años, desapareciera.

El pasado fin de semana se publicaron extractos del mismo en un periódico sin el conocimiento ni consentimiento de Kate o su marido Gerry. Un amigo dijo anoche: “Kate está furiosa y disgustada”.

“Está furiosa han sido revelados sus sentimientos más íntimos. Lo que ha sido aun peor, es que parece que ella ha dado su consentimiento.”

Por su naturaleza, este material no fue incluido entre los 19 volúmenes hechos públicos por la fiscalía.

El amigo añadió: “La sospecha es que el diario ha sido filtrado por alguien de entre las autoridades lusas.”

Se cree que los abogados de los McCann están reclamando una disculpa y una compensación económica para el fondo Find Madeleine. Los McCann no harán comentarios.

Comentario de Mercedes: Pero qué previsibles son. Tal como dije ayer, aquí tenemos el VERDADERO motivo de la publicación del diario. Desacreditar a las autoridades portuguesas y conseguir más dinero. De paso dejamos de hablar de la carta abierta que Sofía le ha enviado a Kate. Por supuesto, el amigo portavoz de los McCann ni la menciona, Kate no está ni disgustada ni furiosa con dicha carta. De eso se trata de desviar la atención. Analizando las palabras del amigo portavoz, podemos deducir que “el diario muestra los sentimientos más íntimos de Kate”, sentimientos que Kate McCann, por lo que parece, dejó de tener en cuanto la PJ confiscó el diario. Kate, que sepamos, nunca volvió a plasmar esos sentimientos “maternales” por escrito. ¿Por qué no fueron a comprarle una nueva libreta para que pudiera continuar con su tratamiento “terapéutico”? Lo dicho spin, spin, spin….

Kate… La demanda que estamos esperando es la de Amaral ¿cómo lo llevan tus abogados?