Dicho esto, hay aspectos del caso que ya me preocupan y el
principal es lo que la Policía Metropolitana se propuso hacer en la Operación
Grange. Mi contacto con esa investigación, (y lo digo así porque nunca estuve
realmente involucrado en ella), ha sido objeto de unos cuantos comentarios, ornamentación
y malentendidos. Así que creo que está bien que sea yo quien exponga claramente
lo que sucedió y lo que no.
El domingo 9 de mayo de 2010, News of the World (NotW)
publicó una historia que sugería que el Met iba a investigar de nuevo la
desaparición de Madeleine y que me iban a pedir que dirigiera la investigación.
Esto era nuevo para mí en todos los sentidos. Nadie del Met me había pedido, ni
lo hizo nunca, nada semejante.
La única noticia oficial que tuve sobre la nueva
investigación fue una o dos semanas después, cuando oí que la idea de tal
investigación había sido archivada por el momento a raíz del cambio de
gobierno. Recordará la nota del ex Secretario Principal del Tesoro, Liam Byrne,
disculpándose con su sucesor de que no quedaba dinero. El rumor en el Met era
que, a menos y hasta que el Gobierno estuviera preparado para financiarlo, no
emprenderíamos una operación tan costosa que, tan deseable como podría haber
sido, no era realmente algo en lo que los londinenses deberían ver sus impuestos
gastados.
Sin embargo, antes de esto, solo unos días después de la
historia de NotW, recibí una llamada de un oficial de alto rango del Met a
quien conocía bastante bien. Este oficial me dijo que sería mejor evitar la
investigación de los McCann, porque "No te sentirías bien liderando una
investigación en la que se te dijera qué puedes investigar y qué no".
Este es el único consejo que recibí. Me dejó claro que se
trataba de una llamada "no oficial" y que se hizo por mi bien, para
que no terminara asumiendo una tarea que finalmente me frustraría. Nunca
presioné a la persona que llamó para obtener más información, ni estaré nunca en
condiciones de revelar quién era el oficial.
Estaba lo suficientemente familiarizado con la información
del caso McCann en los medios de comunicación como para comprender que había
una renuencia generalizada a hablar de cualquier escenario que no implicara un
secuestro y en el que no se atribuyera culpa ni complicidad a los padres y sus
amigos. Esto me pareció extraño pero, en aquellos días, francamente, estaba lo
suficientemente ocupado con las investigaciones en las que estaba involucrado sin
tener que dedicarme a revisar “información no oficial” de lo que había sucedido
en Praia de Luz. Asumí que había una buena razón para esto; que aquellos que
habían estado involucrados estaban convencidos de que ese era el caso.
Me retiré después de 30 años de servicio a principios de
2011. En el momento en que me retiré no se había tomado la decisión de montar
la operación del Met. Al embarcarme en una nueva carrera escribiendo y
comentando, revisé el caso un poco, lo suficiente como para proporcionar una
ayuda sensata a los medios cuando me lo pidieron. Sin embargo, esto siempre
estuvo relacionado con los procedimientos y técnicas policiales. Nadie me
preguntó qué pensaba que podría haber sucedido, solo qué estaba haciendo la
policía, por qué y qué podrían hacer a continuación.
El año pasado, Sky me invitó a una reunión para discutir lo
que podría lograr una película del décimo aniversario. Les expliqué que estaría
dispuesto a participar, pero que mi posición era una en la que era igual de
escéptico sobre la teoría aceptada (secuestro) como lo era de cualquier otra.
Dije que también me gustaría aclarar que la Operación Grange estaba tan
restringida desde el principio que estaba destinada al fracaso. Para sustentar
esta afirmación, presenté los términos de referencia originales de la Operación
Grange y les conté los consejos que había recibido en la llamada telefónica.
A su favor (y, en realidad, para mi sorpresa), aceptaron que
este era un punto de vista válido y que debería presentarse en su grabación.
Dentro de las limitaciones y obstáculos de los asuntos legales, el proceso de
edición y la necesidad de presentar una historia completa, creo que la grabación
de Sky era bastante buena. Ciertamente es el documental más equilibrado que he
visto y con el que estoy completamente feliz de estar relacionado. También creo
que representó bien mis puntos de vista.
No soy ni anti ni pro McCann ni de los medios ni de la
policía. Sentí, de hecho siento, que las limitaciones que parecen haber sido
impuestas a la Operación Grange eran dignas de ser publicitadas e impulsarían
el debate. No estoy abogando necesariamente por que comenzara de nuevo, sólo se
entiendía que era y qué intentaba hacer.
Sin embargo, sí creo que un punto digno de reforzar es
que una eliminación o implicación adecuada, concluyente y razonada de Kate y
Gerry McCann habría sido del interés de todos, sobre todo de ellos. Ese habría
sido mi primer objetivo si hubiera liderado la Operación Grange, y ese es el
mayor problema que tengo con la forma en que se llevó a cabo esa investigación.
Eliminar o implicar a las personas más cercanas al niño en este tipo de
casos no solo es la mejor práctica investigativa documentada, sino que es de sentido
común. Si la Operación Grange hubiera hecho esto, todo sería mucho más
claro. No tengo ni idea de por qué no se hizo, pero estoy satisfecho con lo que
ha dicho el Met y con lo que está disponible que no fue así.
Quisiera seguir planteando y debatiendo cuestiones relacionadas
con la desaparición de Madeleine cuando sea apropiado hacerlo. Soy consciente
de que, para mantener la credibilidad y el acceso a plataformas significativas,
tendré que hacerlo de manera considerada, razonada y evidenciada. Si no ofrezco
apoyo a las teorías y suposiciones, eso no significa que no las entiendo ni las
creo, solo que no creo que sea apropiado adoptarlas o comentarlas en este
momento.
Finalmente un párrafo sobre mí. No soy tan ingenuo como para
haber pensado que podría involucrarme en este debate sin sufrir algunos abusos
y denigraciones. Si bien es algo que no me preocupa, no me expondré a ello
innecesariamente. Por lo tanto, no participaré en las discusiones en los
diversos foros y es probable que bloquee a aquellos en Twitter que no sean
razonables y educados. Como todos nosotros, estoy lejos de ser perfecto, pero
presté muchos años de servicio a la comunidad, al igual que miles de personas,
y durante ese tiempo tuve la suerte de lograr algunos resultados de los que
siempre estaré orgulloso. Mi experiencia y reputación son bien consideradas por
los medios y no tengo necesidad de dar relevancia a mi perfil; Rechazo tanto
trabajo de los medios como el que acepto. No estoy escribiendo un libro sobre
Madeleine McCann y no tengo otra motivación que la que me ha acompañado durante
muchos, muchos años, para llegar a la verdad. Así que continuaré tuiteando
sobre el caso (@colinsutton) y cuando la gente haga buenas preguntas, intentaré
responder rápidamente.
© Traducción de Mercedes