25 de marzo de 2011

Caso Madeleine McCann: "JUST LIKE THAT" – “Y ASÍ, SIN MÁS”

McCann Files

EXCLUSIVA para mccannfiles.com

Por Dr. Martin Roberts
22 Marzo 2011

"JUST LIKE THAT" – “Y ASÍ, SIN MÁS”


Ahí estaba Gerry McCann, al ordenador, haciendo su imitación de Kojak, mientras la PJ intentaba llamar su atención, sin mucho éxito, sobre un presunto avistamiento de su hija. Sin duda estaba ocupado planeando la estrategia de marketing. “Así y así” (retirando momentáneamente el chupa-chups de la boca). Incluso el ilusionista desafortunado prepara sus actuaciones. Quien podría olvidar al fallecido Tommy Cooper (contemporáneo de Max Bygraves en “variedades”) y su número histérico de la “Botella de Cristal. Cristal de Botella, cuando de repente se encontró incapaz de controlar la aparición persistente de botellas ocultas en el interior del contenedor cilíndrico – “Y así, sin más”. Tanto Kojak como Cooper operaban con pruebas; uno ávido de establecer la verdad y el otro demostrar lo que no lo era. Mientras que Gerry McCann podría aspirar a ser una especie de Kojak, en realidad se inclina más hacia Tommy Cooper.

“No puedes probar una negación” dijo Gerry, una vez. Habla la voz de la experiencia. Aunque no será porque no lo haya intentado. Al igual que el ilusionista, Gerry expuso su tenderete para convencer al mundo de algo que no era. Jon di Paolo de Sky TV, informando en directo desde el tribunal de Lisboa en enero del pasado año nos informó:

12:24: El abogado de los McCann señala que “pruebas” normalmente avistamientos – sugieren que Madeleine aun está viva.

12:25: Dice que los McCann no son responsables de generar ninguna de estas “pruebas” de que su hija no está muerta.



(Cita) Ahora bien, ahí hay dos cosas (fin cita). Pruebas que sugieren que Madeleine todavía esta viva normalmente en forma de avistamientos, implicando que, en alguna ocasión pueden ser de otra forma. Sin embargo, cualquiera que sea la forma de estas “pruebas”, los McCann no son responsables de generarlas (es decir, fabricarlas) – dice el abogado de los McCann, defendiéndolos contra una acusación que ni siquiera ha sido hecha. Por lo tanto no debería sorprenderles que uno quisiera informarse sobre esa posibilidad, ¿no?

“Kate y yo creemos firmemente que Madeleine estaba viva cuando se la llevaron del apartamento”. Eso es alentador, aunque es difícil ver por qué Madeleine no debería haber estado viva en ese momento, cuandoquiera que haya sido. Después de todo la dejaron durmiendo. Aunque cada creencia lleva un elemento de incertidumbre – de otro modo no sería un acto de fe, sino una convicción basada en un hecho. Dado el escenario descrito tan a menudo en el pasado, esta creencia indeterminada invita a dos preguntas consecutivas ¿Estaba viva Madeleine? ¿Estaba dormida Madeleine? Teniendo en cuenta que ni siquiera Kate y Gerry podían estar absolutamente seguros, es lógico pensar que hubiesen previsto cierto grado de recelo por parte de su audiencia también y la mejor forma de disipar la duda es, por supuesto, ofrecer pruebas de apoyo.

Ahora todos juntos: Los McCann no son responsables de generar ninguna de estas “pruebas” de que su hija no está muerta.

No son responsables de los avistamientos en todo el mundo, desacreditados casi tan rápidamente como son planteados, ni, debemos entender, aquellos denunciados en Portugal, concretamente en Praia da Luz, tanto antes como después de que se denunciara la desaparición de Madeleine. Esto incluiría las “pruebas” atribuibles a Jane Tanner, la familia Smith y, no nos olvidemos, David Payne.

Es importante tener en cuenta que los McCann y sus amigos pusieron sello a su incredibilidad muy pronto, al entregarle a la PJ una línea temporal mecanografiada que representaba una declaración realizada en nombre de un comité. Se desprende de este simple acto de colusión, si nada más, que las múltiples declaraciones realizadas por esas mismas personas posteriormente no pueden de ninguna manera constituir una corroboración “independiente” de nada en absoluto.

Así, si uno decidiera cuestionar la “creencia” de los McCann de que Madeleine estaba viva a las 21h05 aquel jueves por la noche, basándose en la afirmación de Gerry de que la vio dormida, no podemos buscar confirmación del buen estado de salud de Madeleine basándonos en el avistamiento de David Payne un poco antes aquella tarde. A pesar de la pertenencia de David Payne a este eventual “comité” debemos considerar la veracidad de su versión a la luz de sus afirmaciones de haber visto a Madeleine por última vez, ¡dos veces – a las 17h00 y más tarde sobre las 18h40! Por lo tanto, no hay ninguna corroboración independiente de que Madeleine estaba viva aquel jueves por la noche. Solo disponemos de la palabra de los McCann, es decir, la palabra de una pareja que, durante la duración de la investigación oficial, fueron considerados sospechosos de la desaparición de su propia hija. Presuntos avistamientos que tuvieron lugar con posterioridad (es decir, aquellos de Tanner y los Smith) no dan fe del estado en que se encontraba la niña que los testigos pudieron o no haber visto siendo transportada por las calles. Para que uno de los Smith hubiese preguntado “¿está dormida?” confirma que no podían saberlo, de ser el caso. Ni Jane Tanner podría haber deducido tanto de un vistazo fugaz de unas piernas colgantes.

Si el estado físico de Madeleine aquel jueves por la noche puede ser cuestionado, también puede cuestionarse su somnolencia. “Nosotros creemos” claramente no es suficiente para disipar toda sospecha. ¿Pero qué hacer al respecto? Bueno, si hubiese sido llevada aquella noche de su habitación entonces ella debería, sin discusión, estar dormida. Y si estaba dormida estaría vestida apropiadamente, es decir, con un pijama con alguna descripción. Por lo tanto, describir el pijama debería de alguna manera reafirmar la versión, ¿no es así? Madeleine desapareció con este pijama concreto, especialmente para un público emocionalmente preparado, una imagen más convincente de un secuestro nocturno.

La primera referencia al pijama de Madeleine proviene de los McCann, durante sus respectivas declaraciones como testigo el 4 de mayo. Por su parte, la sugestionable Jane Tanner exhibe rápidamente lo que solo puede ser descrito como un recuerdo progresivamente mejorado, saltándose marchas como un coche con un embrague defectuoso; de un hombre transportando algo, a transportando una criatura en pijama, a transportando lo que se presume una pequeña niña por el pijama, basándose en una parte superior “rosada”, que está completamente oculta a la vista y a pesar de una luz de calle “anaranjada”. Mostró la misma determinación en que el oficial de policía que la entrevistó un año después en el marco de las entrevistas Rogatorias en la Comisaría de Leicester “pensara rosa”.

Jane Tanner (miembro del comité de pruebas no se olvide) apoya la historia del pijama rosa después de las 21h05 pero, por alguna razón que solo él mismo conoce, David Payne no consigue señalar este mismo detalle. A él le gustaría que creyéramos que Madeleine estaba perfectamente bien en el apartamento de los McCann aquella tarde. En su entrevista Rogatoria menciona haber visto a todos los niños, pero vestidos con “atuendo de dormir”, predominantemente blanco. Curiosamente Kate también declina clarificar qué es lo que llevaba puesto Madeleine a esta hora. En su declaración del 6 de septiembre de 2007, describe lo que llevaba puesto ella misma (una camiseta de manga larga verde, pantalones vaqueros azules, calzado deportivo y calcetines blancos) así como “poniéndole pijamas y pañales a los gemelos,” pero no revela cómo, exactamente, estaba vestida Madeleine.

Por lo tanto, una vez más, solo disponemos de una afirmación seria a la observancia de un detalle importante. Y una vez más es atribuible a los McCann, que “no son responsables de generar ninguna de estas “pruebas” de que hija no está muerta.”

Dejando a un lado la cuestión de si Madeleine McCann fue en realidad secuestrada el jueves por la noche, en realidad no hay pruebas, en forma de corroboración independiente, de que gozaba de buena salud más temprano aquella tarde, o retirada del apartamento mientras dormía, tal como la insistente referencia a su pijama debería hacernos suponer. Y si piensas que esto es una cometa en el aire, entonces por favor recuerde otro de los notorios resbalones gramaticales de Kate McCann:

“Sé que lo que ocurrió no es debido al hecho de haber dejado a los niños durmiendo.”

“Sé que ocurrió bajo otras circunstancias.”

El quid de esta contorsión verbal en concreto es que “las circunstancias”, en este caso, no son en si mismas causales. Dejar a un niño durmiendo no es necesariamente cometer un acto que contribuya a la negligencia que lleva a un desenlace no deseado. Los padres lo hacen constantemente cuando se van ellos mismos a la cama (esto es, dejar a sus hijos durmiendo). Kate McCann claramente compara “dejar a los niños durmiendo” con “otras circunstancias”. Sea lo que sea lo que “ocurrió” era independiente de ambas cosas.

¡Sin embargo los avistamientos… los avistamientos!

Entonces muy bien. El avistamiento (el de Jane Tanner podemos enviarlo al reino de Hans Christian Andersen). La única referencia remotamente creíble de una niña pequeña vista en las calles de Praia da Luz aquella noche del jueves, 3 de mayo de 2007, es aquella ofrecida por los miembros de la familia Smith que, por motivos totalmente desinteresados, contactaron con la policía portuguesa en relación a su experiencia colectiva, de la cual dieron un informe detallado en su debido momento – el 26 de mayo de 2007. He aquí las tres declaraciones que guardan mayor relación con la pequeña niña que vieron siendo transportada sobre las 21h55.

Martin Smith

• Llevaba puesto un pijama de color claro. No puede afirmar con seguridad el color.

Aiofe Smith

• Llevaba puesto pantalones claros, blancos o rosa claro, que podría haber sido un pijama. No recuerda si tenían algún dibujo ya que estaba oscuro.
• También llevaba puesto una parte superior clara, de manga larga. No la vio bien porque el individuo rodeaba con sus brazos a la niña. No está segura de si la parte de la arriba era del mismo color que el pantalón pero los pantalones eran claros.

Peter Daniel Smith

• No recuerda la vestimenta muy bien pero cree que era ropa veraniega, de color claro.

Sería atrevido y francamente especulativo, concluir incluso que la niña vista por los Smith en la oscuridad llevaba puesto un pijama, menos uno rosa, y mucho menos uno rosa parecido al que supuestamente pertenecía a Madeleine que, tal como revela el comunicado de prensa autorizado de la época era de manga corta.

¿Estaba viva Madeleine cuando fue “llevada”? Los McCann así lo creen. ¿Estaba dormida cuando fue “llevada”? Los McCann nos han dicho que lo estaba. ¿Existe una confirmación inequívoca de una parte independiente en lo que respecta a cualquier de estos detalles? No. Y así, sin más.

Traducción de Mercedes