Milenio
7/04/2010
Gráfico: Moisés Butze
No precisan la fecha exacta del deceso, aunque desapareció desde el 21 de marzo.
La pequeña Paulette Gebara Farah murió a causa de asfixia por sofocación sin que hubiera, en su cuerpo, huellas de violencia o de ataque sexual, concluye la necropsia practicada al cadáver de la niña el pasado 31 de marzo.
El dictamen elaborado por el Servicio Médico Forense del Estado de México, del que MILENIO posee copia, arroja cinco conclusiones clave para conocer la forma en la que murió la niña de cuatro años, quien fue encontrada al pie de su cama, en un espacio de aproximadamente 15 centímetros entre la base y el colchón.
La conclusión principal del documento es que —como lo anunció la semana pasada el procurador de Justicia mexiquense, Alberto Bazbaz Sacal— la niña murió a causa de “asfixia mecánica por sofocación en su modalidad de obstrucción de orificios de la
respiración”.
Sin embargo, en este punto resalta un detalle: la asfixia, según el texto, no se debió a un acto de violencia, sino a que el tórax de la pequeña fue presionado por el reducido espacio en que ella estaba: “la compresión torácica (fue) por posición, lo que se clasifica de mortal”.
Otras de las conclusiones señalan que el cuerpo de Paulette no presenta evidencia de ataque sexual, según los exámenes ginecológico y proctológico: “Sin huellas de violencia reciente ni de coito habitual”, reza el documento elaborado por el Servicio Médico Forense del Estado de México.
La cuarta conclusión establece que “en base a las características del alimento encontrado en cavidad gástrica, se establece que la menor…ingirió alimento al menos cinco horas antes de su muerte”.
Sin embargo, en la necropsia no se logra determinar la fecha precisa en que murió la pequeña, quien desapareció entre la noche del domingo 21 de marzo y la madrugada del 22 de marzo. De acuerdo con el documento, la niña murió entre cinco y nueve días antes de que se le practicara la intervención forense.
En la primera parte del texto hay un detalle singular que presenta el cuerpo de Paulette y del que, hasta ahora, no se ha proporcionado mayor información ni aclaraciones por parte de la Procuraduría mexiquense: la niña tenía dos trozos rectangulares de tela adhesiva en posición vertical sobre sus mejillas. A lo largo del documento, de tres páginas, no se profundiza en este dato ni se especifican medidas ni otras características de los pedazos de tela.
Otros puntos que resalta el texto es que la niña presentó desprendimiento de piel en el párpado superior derecho, malar derecho, el mentón y en ambos glúteos. También se le encontraron moretones negruzcos en el codo y la rodilla izquierdos.
El documento, marcado con el expediente 321/2010 del Semefo mexiquense —perteneciente al Instituto de Servicios Periciales de la Procuraduría de Justicia—, fue elaborado a las 6:30 horas del 31 de marzo por los peritos César Hernández y Héctor Hugo Hernández Ortega.
MILENIO obtuvo copia de una imagen inédita del cuerpo de Paulette Gebara Farah, tal como fue encontrado la mañana del miércoles 31 de marzo en la recámara de su departamento en la zona de Interlomas.
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Dictamen del Servicio Médico Forense del Estado de México obtenido por MILENIO
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Dictamen del Servicio Médico Forense del Estado de México obtenido por MILENIO
