23 de febrero de 2009

Caso Madeleine McCann - Autoridades británicas clasifican la investigación como “seguridad nacional”

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24 Horas

Espías del caso Maddie

Los ingleses no muestran a los policías portugueses las imágenes de los satélites que apuntaban al Algarve el día de la desaparición de Maddie. Dijeron que, por casualidad, en ese momento los satélites estaban todos girados hacia Marruecos. La policía inglesa declaró ahora que en la investigación McCann estarían implicados los servicios secretos.

Continúa con el artículo publicado por Duarte Levy 20-2-09: Maddie es un caso de seguridad nacional

Las muchas bajas en el caso de la niña raptada en el Algarve

La investigación sobre la desaparición de Maddie quedó marcada por un importante número de bajas entre diplomáticos y policías. En Portugal, después de la salida de Gonçalo Amaral, destituido de la investigación a petición de las autoridades británicas, también se marchó el entonces director nacional de la PJ, Alípio Ribeiro, así como otros inspectores.

Guilhermino Encarnaçao, director nacional adjunto de la PJ, se encuentra en una situación de baja de larga duración por motivos de salud, aunque fue objeto de las declaraciones de un antiguo detective privado español, que garantizó la existencia de un “topo” en el seno de la PJ que habría dado información de la agencia Método 3. El “topo” no sería el director de la PJ en Faro sino alguien próximo a él.

Del lado británico el embajador John Buck fue sustituido el 10 de septiembre de 2007, el día siguiente de la constitución como arguidos de Kate y Gerry McCann. Un mes antes, en agosto del mismo año, el cónsul en el Algarve, Hill Henderson, había dimitido abandonando completamente la carrera diplomática. Su sustituta, Célia Edwards, acabaría también por no permanecer mucho tiempo en Portugal.

Del Foreign Office también se marcharon Sheree Dodd y Clarence Mitchell, la primera como responsable de la comunicación del parlamento inglés y el segundo, como portavoz oficial de matrimonio McCann, manteniendo entretanto, durante algún tiempo, una “relación privilegiada” con el gobierno británico.

Duarte Levy

Caja: Ni Sócrates los asustó

La desaparición de Madeleine McCann mereció, desde el primero momento, una atención muy especial por parte de las autoridades británicas: fue creado un gabinete de crisis especialmente dedicado al apoyo del matrimonio McCann en seno del Foreign Office antes incluso de la llegada al lugar de los primeros inspectores de la Policía Judiciaria.

La importancia dada por el gobierno británico al matrimonio McCann sobrepasó todas las expectativas e incluso los miembros de los servicios secretos de Su Majestad que se desplazaron a Portugal, acabaron por mostrarse sorprendidos por la facilidad con la que Kate y Gerry McCann entraban en contacto con Tony Blair o Gordon Brown.

El empeño del gobierno británico fue tal que ni la intervención del Primer Ministro portugués, José Sócrates, pidiendo a los políticos que no interfirieran en la investigación, consiguió convencer a los ingleses que dejaran a la PJ trabajar en paz.

Traducción de Mercedes